El pasado 16 de diciembre, se celebró la festiva comida de fin de año para la comunidad de colaboradores, profesores y personal administrativo del ITAM. El evento, contó con la participación especial de Alejando Baillères, Presidente de la Junta de Gobierno del ITAM, quien participó en esta comida por primera vez desde que asumió este cargo.
Un festejo que se extrañó
Con motivo de las fiestas navideñas y de fin de año todos los colaboradores, personal y profesores del ITAM se reunieron por primera vez después de 4 años desde la última convivencia de este tipo. Este año, 2022, tuvo una asistencia récord con más de 530 participantes. El Rector Arturo Fernández Pérez, aprovechó la oportunidad para agradecer y conmemorar el esfuerzo colectivo que se realizó durante el 2022:
“Quiero agradecer el gran esfuerzo que se ha realizado este año, aún con las secuelas que ha tenido la pandemia. Los obstáculos se han superado gracias al ingenio y compromiso de los colaboradores”.
Durante su discurso, el Dr. Fernández también destacó las mejorías que hubieron en la evaluación de profesores, en la calidad de los servicios administrativos, los servicios médicos y mucho más. Reconoció el gran esfuerzo colectivo que se realiza año con año, que permite realizar la misión educativa del ITAM con sus egresados notables que contribuyen de distintas maneras con la sociedad.
El legado de la familia Baillères
Para iniciar el convivio, Alejandro Baillères pronunció su discurso agradeciendo a todo el personal del ITAM por todo el esfuerzo demostrado durante el año. Conmemoró a su padre, Don Alberto Baillères, para quien el ITAM era su máximo orgullo. Alejandro Baillères, mencionó que, como su padre, se suscribe a los tres principios que rigen a nuestra institución: la autonomía universitaria, la libertad de cátedra y el sentido comunitario, los cuales deben prevalecer y guiar el día a día de la vida universitaria.
“Celebro y me entusiasman las aspiraciones de excelencia humana y académica del ITAM. Y me comprometo a velar por el buen gobierno del ITAM y su solvencia financiara, para que nuestra Institución siga mejorando”.
Gracias al compromiso y entrega de los colaboradores del ITAM se logran cumplir todos esos propósitos. Aún con los años difíciles que se han vivido recientemente, la historia del ITAM siempre ha demostrado su resiliencia y la de su comunidad, lo cual llena a Don Alejandro de esperanza y ánimo para el futuro. El discurso no acabó sin antes recordar la última comunicación que realizó Don Alberto Baillères a la comunidad itamita:
“Deseo fervientemente que nuestro querido ITAM siga siendo una institución de educación superior particular, sin afán de lucro, laica y sin ataduras políticas. Esmerada en la excelencia académica y humana, donde siempre ondea airosa la bandera de nuestra declaración de principios. Aspiro a que nuestra comunidad universitaria sea siempre un faro que ilumine el devenir empresarial, social y político del país con la luz de la razón, la aureola del conocimiento científico, la regencia de los hechos, el candil de la ética y con el fuego de una pasión por conseguir la grandeza de México mediante sus contribuciones para conseguir una sociedad más justa, libre y prospera.” – Don Alberto Baillères
La primera fiesta de fin de año en esta década para nuestra comunidad
Esta edición del evento fue especialmente emocionante ya que , tras los años de distanciamiento social, esta fue la primera fiesta de fin de año de esta década. A manera de tradición, el festejo se realiza el último día de actividades administrativas. El evento es organizado por la Oficina de Relaciones Públicas y durante el mismo, se reconoce la trayectoria de las personas que cumplen lustros en el Instituto. Asimismo, se entregan regalos a distintas personas de la comunidad y es un momento especial para festejar la amistad y el compañerismo entre los colaboradores y para reconocer el compromiso de todas las personas con el Instituto.
ANUNCIO
