Los profesores eméritos representan la culminación del esfuerzo intelectual. En todas las instituciones académicas, esta figura designa a los profesores de larga trayectoria que, debido a sus méritos, siguen desempeñando funciones de docencia, asesoramiento o dirección en sus respectivos campus. Sus conocimientos son honrados por las universidades que reconocen, en pública reunión, tanto sus aportaciones como su hoja de servicio. La designación de los profesores eméritos es, pues, un acto de justicia, admiración y respeto.

Siguiendo, pues, una tradición que ennoblece a la academia, el martes 6 de febrero del 2018 tuvo lugar la ceremonia de Nombramiento de Profesores Eméritos 2018. El ITAM reconoció como profesores eméritos al Dr. Carlos Bosch Giral, del Departamento Académico de Matemáticas; al Mtro. Antonio Jesús Díez Quesada, del Departamento Académico de Estudios Generales, y al Dr. Rodolfo Darío Vázquez Cardozo, del Departamento Académico de Derecho

“El emérito es una distinción que el ITAM otorga a miembros de su personal académico que por su dedicación y labor eminente en las actividades académicas en el Instituto, por su calidad humana y por su espíritu de servicio, se han convertido en modelo para los demás miembros del claustro académico y la comunidad universitaria en su conjunto”

Con estas palabras, el vicerrector Alejandro Hernández dio inicio a una ceremonia repleta de emociones, empatía y trascendencia, pues tres profesores del ITAM serían nombrados profesores eméritos de la institución que fue, por lustros, su alma mater.

Los profesores eméritos del 2018: Dr. Bosch Giral, jefe del Departamento Académico de Matemáticas

El primero en recibir este nombramiento fue el Dr. Carlos Bosch Giral, profesor en el Departamento de Matemáticas. Como bien mencionó el Dr. William Alardín, coordinador de investigación científica de la UNAM y encargado de glosar la figura del profesor Bosch, la ceremonia tuvo elementos remarcables:

 “Una persona con la designación de emeritazgo es alguien que su comunidad considera excepcional, esto va más allá de ser un buen maestro. Yo creo que es convertirse también en un ejemplo y Carlos es la viva imagen de esta idea”.

Con lágrimas en los ojos, el Dr. Bosch agradeció a todos los trabajadores y alumnos del ITAM, así como a sus familiares y colegas, por todo el apoyo que le han brindado. Y dedicó un agradecimiento especial a su señora esposa, a sus hijos y a la profesora Beatriz Rumbos. “Me siento muy honrado de ser profesor emérito de esta institución”, recalcó el profesor Bosch al terminar su discurso de agradecimiento.

Los profesores eméritos del 2018: Mtro. Antonio Díez Quesada, profesor del Departamento Académico de Estudios Generales

La siguiente en participar fue la profesora Julia Sierra Moncayo, encargada de dar unas palabras por el nombramiento del Mtro. Antonio Jesús Díez Quesada. “Es un hombre que literalmente transpira cultura. Cultura en el sentido de saberes eruditos”. Elementos de conocimiento que, al decir de la profesora Sierra, lo convierten en “un pedagogo nato» cuya «personalidad es una misteriosa mezcla de sabiduría, sencillez, elegancia y sobriedad”. Además, resaltó la antropóloga, el gran interés del profesor Quesada es la formación integral de los alumnos. A fin de cuentas, «siempre ha buscado comunicarles su amor por el conocimiento, la prudencia, la sabiduría y la responsabilidad social».

Agradeciendo los elogios recibidos, el profesor Quesada expresó su convicción que:

“El ITAM representa para mí un lugar ideal en el cual se encarnan los valores más altos de la cultura humana como son el rigor intelectual y la defensa de los valores más apreciados. Para mí, es un orgullo poder participar en una institución tan digna y admirable como es el ITAM”.

Dr. Rodolfo Vázquez Cardoso, profesor del Departamento Académico de Derecho

El último profesor en ser nombrado como profesor emérito fue el Dr. Rodolfo Darío Vázquez Cardoso, docente del Departamento Académico de Derecho. En palabras del Dr. Ulises Schmill Ordóñez, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación entre 1991 y 1995,

“Rodolfo ha logrado generar publicaciones y seminarios que han cambiado la cultura jurídica de México. Nadie en la historia de México lo ha hecho de manera tan brillante [..]. La labor editorial, académica y doctrinal de Rodolfo Vázquez contiene enseñanzas profundas y haberlo nombrado Profesor Emérito de esta institución es un reconocimiento muy bien merecido”.

Con gran orgullo, el Dr. Vázquez Cardoso agradeció a la Junta de Gobierno del ITAM, al rector, al vicerrector, a sus colegas y compañeros de trabajo, así como a su familia, hijos y esposa, todo el apoyo brindado. Recalcó que la primera misión de nuestra universidad es formar buenos ciudadanos y hacer de nuestro Instituto un lugar comprometido con la igualdad de género, la no discriminación y los derechos humanos.

Cabe resaltar que su magisterio fue de tal calado que los propios alumnos pidieron, en carta abierta, la concesión de tal mérito académico. Las razones expresadas merecen una larga citación porque explican el quehacer fundamental de la docencia universitaria, que es transformar la vida de sus alumnos:

Su clase es la definición perfecta de cómo debe ser un aula universitaria: un foro democrático, de libre de discusión de las ideas y respetuoso de la diversidad en todos sus sentidos. No hay mejor homenaje a los filósofos de la tolerancia –Voltaire, Montaigne, Rawls- y a las libertades democráticas modernas que una clase de Rodolfo Vázquez. Durante sus lecciones, el aula encarna el espíritu de la conciliación, el equilibrio y la libertad. Hace algunos meses, Jorge Cerdio, Jefe del Departamento de Derecho del ITAM, al inaugurar el seminario dedicado a discutir la obra de Rodolfo Vázquez, señaló que las clases del profesor Vázquez, su metodología, contenido y dinámica, tenían como gran objetivo último formar ciudadanos de una sociedad liberal e igualitaria. Es cierto: ninguno de nosotros hemos dedicado nuestra vida profesional a la filosofía del derecho, pero lo cierto es que gracias a las clases del profesor Rodolfo Vázquez hoy estamos conscientes de la relevancia de no encerrarnos en nuestros intereses privados y estar pendientes de la cosa pública. En este sentido, la aportación de Rodolfo Vázquez al ITAM es invaluable y de suma trascendencia.

Carta abierta al ITAM: Rodolfo Vázquez profesor emérito. Paola Cicero Arenas, Antonio Espinosa Aguilar, Saúl López Noriega y Alejandro Orozco y Villa. Exalumnos de la licenciatura en derecho del ITAM. Nexos. 12 de junio de 2017.

 

Sirva, pues, como recordatorio que los profesores eméritos merecen tal título de grandeza.

Los profesores eméritos, orgullo del ITAM: rector Arturo Fernández

 

Para finalizar la ceremonia, el rector Arturo Fernández destacó que:

«Los tres profesores eméritos recogen cada semestre las más altas consideraciones de sus alumnos, quienes repetidamente insisten en reconocerlos como sus mejores maestros. Sus cátedras no solo transmiten a sus estudiantes el material correspondiente, sino que además les inspiran carreras profesionales y vocaciones, cultivan su intelecto”.

Como bien mencionaba la primera autoridad de nuestra casa de estudios, esta no puede considerarse como un acto menor:

«Para una institución universitaria como el ITAM, la práctica de esta ceremonia de nombramiento de profesores eméritos constituye un honor y un deber ineludible para honrar a los miembros más prominentes de su facultad. Aquellos que se han distinguido por su quehacer académico a favor de la institución”.

Si quiere saber más del acto, puede revisar la ceremonia de nombramiento de profesores eméritos en el siguiente video: