Para muchos estudiantes del ITAM, la vida académica no termina al acabar la licenciatura. Es, más bien, el principio de una gran aventura de vida. El posgrado en el extranjero supone una transición natural para muchos estudiantes del ITAM, cuyo objetivo no es solo una mayor especialización en ciertas áreas de estudio, sino también la experiencia formativa de estudiar fuera de nuestro país y aprender de los mejores investigadores del mundo.

El 24 de mayo de 2018, el ITAM invitó a un coctel a los 115 estudiantes que continuarán sus estudios de posgrado en el extranjero este otoño. Entre los integrantes, todas las carreras del Instituto están representadas. 95 de los integrantes harán sus estudios de maestría, mientras que los otros 20 buscarán obtener su posgrado en diversas áreas. Los egresados se dirigen en su mayor parte a Estados Unidos, Reino Unido, Francia o Alemania. La universidad que más estudiantes recibe es la Universidad de Chicago, en la cual 9 egresados del ITAM estudiarán su posgrado.

 

Posgrado en el extranjero:  un lugar llamado Chicago

 

La alianza entre nuestro instituto y la Universidad de Chicago ha sido, sin lugar a dudas, un punto de inflexión histórica para nuestros egresados, pues el vínculo personal que crearon decenas de maestros y doctores con uno de los centros punteros en investigación económica permitió abrir la mirada de México hacia planteamientos liberales y de mercado que, con los años, se volvieron consensuales. En 2014, por ejemplo, los académicos del ITAM formados en Chicago (Francisco Gil, Isaac Katz, Ignacio Trigueros, Gabriel Martínez, Jorge Moreno y Ricardo Samaniego) recibieron a sus colegas de la División de Ciencias Sociales.

 

 

Sobre el tema, puede leerse la excelente investigación de la Dra. García Ugarte sobre la historia del ITAM y sus orígenes filosóficos y morales, basados en la idea de recuperar la autonomía de la sociedad civil frente a estatismo que, a finales de la década de 1940, era hegemónico en casi todo el mundo. Pero sería el puente establecido entre el profesor Francisco Gil Díaz como alumno del doctorado en aquel campus el que cambiaría todo. Desde 1970 las redes intelectuales que se crearon entre el futuro director académico y Arnold C. Harberger (profesor emérito  de la institución que ejerció de guía y mentor  de los reconocidos, y a menudo estigmatizados, Chicago Boys chilenos) fueron la clave de una fructífera interacción que, como bien señala Sarah Babb en Managing Mexico: Economists from Nationalism to Neoliberalism, «americanizó» la política económica mexicana para insertarla en lo que hoy denominamos globalización.

 

 

A partir de este trasfondo histórico, se puede entender por qué cuando los itamitas deciden estudiar un posgrado en el extranjero eligen, tan a menudo, The University of Chicago. Y, como bien dijo Alejandro Hernández, vicerrector del ITAM, al dar la bienvenida a los invitados de honor, este tipo de estudios representa una oportunidad única que forma, para siempre, la conciencia y la experiencia de los jóvenes:

 

“Serán los mejores años de su vida. Lo único malo es que no dura más tiempo”.

 

El vicerrector resaltó la importancia de los profesores y asesores que ofrecieron su tiempo para ayudar a los estudiantes durante sus procesos de titulación (tesis) y en los procesos de admisión al posgrado en el extranjero. Finalizó su discurso pidiendo a los egresados que aprovecharán esta experiencia al máximo, no solo disfrutando sus estudios, sino también la cultura nueva que experimentaran en cada campus.

 

 

Entre los integrantes de esta generación está Sebastián Guevara, egresado de Ciencia Política, quien hará su maestría en Política Educativa en la universidad de Stanford. Sebastián resaltó cómo la exigencia académica del ITAM le ayudó a prepararse para los exámenes estandarizados. “La reputación internacional del ITAM en las escuelas es muy importante, ayuda a posicionarte como buen candidato para la maestría/doctorado que quieras”, afirmó el egresado en Ciencia Política.

 

Estudiar un posgrado en el extranjero con beca: la Knight-Hennessy y la Fulbright-García Robles

 

Acompañando a Sebastián en Stanford estará otro egresado del ITAM, Alain Pineda. Alain es licenciado y maestro en Economía por el ITAM y actualmente es analista en el Banco de México. Su principal área de interés es la economía laboral y buscará obtener su doctorado en economía mientras viva en Palo Alto. Alain es receptor de la beca Knight-Hennessy, otorgada por la misma Stanford, y que se concede a 100 estudiantes de todo del mundo para que estudien cualquier programa disponible en tan prestigiosa universidad. Uno de los factores que despertó el interés de Alain y Sebastián por Stanford (además de su reputación) fue la presencia de Raj Chetty, profesor de economía enfocado a estudiar la eficiencia en las políticas públicas.

 

Where you grow up matters – Raj Chetty @Stanford maps the stats #LBSImpact https://t.co/c6IUiAnTJm pic.twitter.com/3w8DLQ8EeB

— London Business School (@LBS) June 19, 2018

 

Al reflexionar sobre su proceso de admisión, Alain compartió un consejo para futuros solicitantes:

 

“Apliqué a 19 doctorados, lo cual terminó siendo caro y estresante. A pesar de esto, sí recomendaría solo aplicar a alrededor de 20, sobre todo para el Doctorado en Economía. Es muy competitivo el proceso, entonces también es importante diversificar”

 

Los costos de estudiar un posgrado en el extranjero suelen ser bastante altos, por lo cual buscar ayuda en el financiamiento vía becas es algo muy común para los egresados del ITAM. La beca Fulbright-García Robles es una beca muy popular y es una gran opción para estudiar el posgrado en los Estados Unidos. En esta generación tenemos a varios becarios.

Una pieza histórica a recuperar: discurso de Arnold Harberger 
durante 
la concesión del Doctorado Honoris Causa del ITAM en 2006 (desde el minuto 25).

Entre ellos están Carlos Galina, quien estudiará su maestría en Ciencia Política en la Universidad de George Washington, y María Anderson Alonso, egresada de Economía y Ciencia Política, que estudiará la Maestría en Políticas Públicas en la Universidad de Harvard. Carlos resaltó que el proceso para aplicar a la beca Fulbright es diferente y se debe hacer con mucha antelación.

 

“Primero uno debe aplicar a la beca Fulbright y este es un proceso que tarda muchos meses. Si recibes la beca, en conjunto con COMEXUS, eliges las universidades a las que quieres aplicar y te ayudan con el proceso de solicitud y admisión para los programas que tú decides. Es un proceso que se debe empezar pronto ya que debes iniciarlo un año y medio antes de la fecha en la cual quieres estar estudiando la maestría”.

 

Los procesos de admisión traen muchos momentos de estrés, lo cual puede llevar a los solicitantes a cometer errores inocentes y graciosos. Por ejemplo, Cynthia Masetto, egresada de Economía en el ITAM, va a estudiar su maestría en Data Science a la universidad de Essex en el Reino Unido. Al mandar su solicitud a este campus inglés, se le olvidó modificar su carta de presentación para que tuviera el nombre de Essex en vez de otra universidad. Al darse cuenta de su error, entró en pánico e intentó cambiar su entrega, pero el sistema ya no lo permitió. Finalmente, el desliz no fue un factor determinante (sí fue aceptada en Essex) y solo es una anécdota graciosa en su proceso de admisión.

 

 

Esperamos que los egresados tengan una experiencia fantástica en el extranjero para que puedan crecer de manera personal y profesional mientras se sumergen en una cultura distinta. ¡Les deseamos mucho éxito y todo lo mejor!